miércoles, 2 de noviembre de 2016


Es una terapia basada en el contacto, en la relación del paciente con los demás y con el entorno, que se centra en el aquí y el ahora.  Considera el entorno como parte del momento actual y como parte de la experiencia; explora cada sesión como única, sin ceñirse a patrones o parámetros preestablecidos, con una mirada existencial y centrándose en la persona. Es un proceso en todos los niveles, sensorial,  emocional, intelectual, incluso espiritual.

Surge en los años 50´s cuestionando las principales corrientes psicológicas del momento, el psicoanálisis y el conductismo.

Tiene una visión humanista del ser humano. Se basa en los postulados de los filósofos existencialistas, como Husserl, Sartre, Merleau-Ponty entre otros. Por tal motivo, la Terapia Gestalt es una terapia que trabaja desde la fenomenología, con la experiencia pura, sin juicios previos, cuidando que no interfieran concepciones previas, centrándose en la experiencia tal cual la vive cada persona.

Se centra en lo que le pasa al paciente, en su experiencia sensorial, en la relación que se establece entre el terapeuta y paciente que va definiendo el rumbo de las sesiones.
Promueve el awareness, el darse cuenta, para trabajar con lo que le pasa a la persona, cómo vive, cómo contacta con los demás, no a través del discurso sino del diálogo, de la exploración consigo mismo y con su entorno.

Se pueden explorar experiencias pasadas desde la experiencia actual y su trascendencia en el presente. Es una terapia emocional, vivencial. Favorece el contacto auténtico con uno mismo y con los otros.

Busca a través de la experiencia, de la exploración, el tocar la novedad, salirse de las pautas de comportamiento, vivenciar nuevas posibilidades que lo lleven a experiencias distintas a las cotidianas.